En determinada época del año, generalmente sobre el mes de septiembre, en los amaneceres y atardeceres de nuestros campos, mas agrestes, se puede escuchar el profundo sonido de la berrea del ciervo. Pocos conocen, sin embargo, el sentido de este comportamiento y todo lo que alrededor de él tiene lugar en este momento del ciclo biológico.
La berrea es un sonido, profundo y largo, parecido a un mujido de vaca, producido por los machos de ciervos durante el celo. Tiene lugar hacia el final del verano junto con algunos otros factores climáticos próximo, y provocan en las hembras una serie de cambios hormonales que las hacen entrar en celo.
Es tremendamente curioso ver cómo un macho se acerca a otro rodeado de un harén, con aspecto desafiante, iniciándose un intercambio de bramidos.
Como ya hemos dicho, el suceso suele quedarse en eso: un careo de berridos, tras el cual el primero se retira, dejando al otro con su harén. Los vencedores harán lo posible por aparearse con el mayor número de hembras y aumentar la prole, que se repartirá por los bosques en mayo, tras ocho meses de gestación.
La berrea ha ido ganando público con los años.
Por eso, recomiendo que vengáis a verlo, porque es un espectáculo digno de ver..